domingo, 21 de junio de 2009

Recurro a una absolucion redentora


entre las faldas de su penitente madre
Tiento a mi destino

sometiendo mi machismo bolido de aromas; fetidos de decepciones,
e hibridos de catastrofes;
choco conmigo y no me siento frustrado
pero si
disfruto de lo distinto que soy...
Una breve instancia, la anestesia distante
un recuerdo
aquella frase
la realidad muy a pesar de todo sigue estando alli.
No habia amor
desdibuje patologias para definirme
lejos de la ceguera mental.
Abreviare este escrito en dos ideas centrales:
prefiero evocar al pensamiento
lo presente enfrentado al frio de la crudeza del riesgo
es energia.
Profesar una duda es priorizar el espiritu.
Ante la conclusion recurro a una absolucion redentora.
No dire el mecanismo de este escrito.
Por eso no dire la revelacion...
No dire que soy un dios perdido con el paso del tiempo
perdido en la inmensidad del espacio
que con cruda templanza he tratado de conquistar
mejor dicho he tratado al menos de dejar una huella
una huella de pintura en el tapizado de la vida
la cual al irse propagando sin escrupulos
pierde el ontologico determinismo que le asegura supervivencia
transmutandose en una dama cruel
al que no le sacian
pleromas pleitesia.
Que tambien se ocultan entre las penumbras
y entre las faldas de su penitente madre
siempre ocultando las penas
y su triste llanto.
Toda la tristeza a simple vista
despojada, hasta de sus ropas mas intimas
siempre fue lo mas que la sensacion de tenerlo todo
y quedarse sin nada.
Esto es frustracion-sueños malditos
lejos de los tres segundos.
M.A.R - 21 de Junio 2009

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