“No quiero ser un yuppie con plata
no quiero ser un hippie ni un punk…
no quiero que me llenen la cabeza con mierda
no quiero que me digan lo que debo pensar… pensar…
no quiero pensar…”
T.T.M.
Sobre la instrucción… Si…
alguien no instruido sobre el tema de los emos y los floggers puede encontrarse con el web youtube.com… en este “site”… allí encontré un video acerca de cómo debe uno darse cuenta cuando está enfrente (o al costado o atrás) de uno de estos jóvenes - tribus urbanas… inclusive puede uno caer en la nostalgia de que pasando los 18 o los 21 ya no puede ser parte de susodichas tribus… es como el “nunca jamás” de Peter Pan… o la película Mad Max donde (el buen Mel Gibson de antes, no el de ahora, aunque siempre fue una cagada) se encuentra con una tribu de pendejos súper organizados como para satisfacer necesidades básicas… se acuerdan? O es demasiado vieja esa peli? .... (Pero no nos vayamos por las ramitas frágiles de este árbol de la vida)… En este video de you tube , que ya ni me acuerdo el link- name, pues detesto (o aprecio) los relatos apresurados en idioma “gallego”… (Existe gente que expresa cierto prejuicio hacia el habla castellana española cuando manifiesto agrado por tal forma de pronunciar las palabras) en este vídeo se explicitan las claves para detectar tales especimenes…
Por un lado ¡¡¡No creo que sean hippies reciclados; los hippies ya fueron, se convirtieron en yuppies… hasta Bill Gates fue hippie y estuvo en contra de la guerra de Vietnam…pero no podemos decir cosas al Vuelo, solamente podemos elucidar cuestiones que suceden a nuestro alrededor y como los jóvenes asimilan habitus y conductas, pautas de vida que estructuran ciertos hábitos de consumo… bailes, lenguajes (hasta escriben coon doos o tres letras ddddee massss cuandooooo escriben… ¿Vieron?) aguante el capicúa aguante, que va de mi parte.
Parece una cultura marginal muy copada… o no... como el lunfardo… esa forma de comunicación que tal vez solo el tango la posea… parte de la mística “argentina” que pudimos exportar como bien cultural propio (por ejemplo hacia Japón con el tango).
Puede que sea una forma de expresión que converge con la emergencia de nuevas tecnologías en comunicación como la telefonía celular o la red… lo demás son solo detalles aunque esos detalles pueden tomar importancia dependiendo del modo en que se mire este tema… (y si hablamos de nuevas tecnologías podríamos pensar en las olimpiadas biónicas: una no tan loca idea del pepo)… pero esto es parte de la moda… de lo “nuevo novísimo”
Estaría bueno encontrar o construir nuevos sentidos de la acción colectiva de este “nuevo” movimiento estético- social… tal vez no lo encuentro por una cuestión generacional por eso ante todo: respeto, cada uno hace de su culo un florero y se coloca la flor que mas le guste… o hace de su pene una flor y la pone si puede… (Antes de que se te marchite o recurras al Viagra®)
Por otro lado un conocido insinuó que acompaña a los floggers en sus “movidas” porque allí “había potenciales votos para la próxima campaña electoral” (creo que era becario del CoNICET…)
Ni glam, ni flog, ni emo,… (diría una vieja vecina) vayan agarrar una pala y hagan un pozo para enterrarse manga de muertos que si sus padres no les compraran lo que tienen estarían haciéndose la paja mirando los culos y tetas de “bailando- patinando- cantando - … por UN SUEÑO”… (vieja perón-comunista – anarquista… la vieja vecina ¿no?)
Sobre el baile nuevo… cada vez que veo a un adolescente moviendo sus píes emulando a los referentes floggers pienso: chauuuu así bailaba mi hermano a esa edad (15 o 17 años)… el ahora tiene más de 35 añitos (¿no es que se extendió la edad de la adolescencia?) estas tribus deberían incluirnos. ¿O piensan que la vida se termina luego?
Encima viene mi sobrinito de tres años y dice: “cuando sea grande quiero ser Flogger y montonero”.
Guido Gelbert.